¿Por qué nos perdemos en el supermercado?
Un estudio ha revelado el porqué podemos llegar a perdernos en un supermercado y también podría ser útil para comprender la desorientación de los pacientes de Alzheimer.
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Probablemente sea la pesadilla de todo niño, pero los adultos tampoco están exentos de ella. Hablamos de la facilidad con la que muchas veces nos perdemos en el supermercado. Entramos, cogemos uno de los carritos para ir echando la comprando y girando de un lado a otro por los pasillos, acabamos por no encontrar el camino hacia las cajas para pagar la compra. Descubramos por qué podemos llegar a perdernos en el supermercado.
Perderse en el supermercado
Según un reciente estudio que se ha llevado a cabo por neurocientíficos de la Universidad de Arizona parece haber un motivo por el que a veces nos perdemos en el supermercado, incluso si estamos acostumbrados a este o de hecho es la tienda en la que siempre hacemos la compra. Algo que tiene que ver con la capacidad del cerebro para almacenar recuerdos espaciales , especialmente en lugares similares, como las cadenas de tiendas y el lapso de memoria que podemos sufrir de repente.
Los académicos mostraron a 27 participantes un video animado presentado desde el punto de vista de un individuo caminando por tres ciudades virtuales. A pesar de que los lugares mostrados eran casi idénticos, ya que todos tenían un campo verde circular con un supermercado en el centro y otras seis tiendas repartidas por todo el país, había algunas peculiaridades que servían para diferenciar unas de otras.
Por otro lado, los supermercados cambiaban en cada ciudad, aunque tres sí que eran comunes, otros tres estaban únicamente en dos ciudades y además, en cada ciudad se podía encontrar un supermercado que era único.
Los participantes tenían que memorizar no sólo como era cada ciudad, sino también el lugar en el que estaba cada tienda, las interesecciones entre ellas o cómo se relacionaban y hasta el tiempo que tardaban en caminar de una tienda a la otra. Una vez realizado este ejercicio, los autores del estudio les preguntaron por el lugar en el que se encontraban los supermercados, y todos los participantes parece que tuvieron algún que otro problema para responder dado que las ciudades se parecían mucho. Aquellos que lograron al menos un 80% en la prueba vieron los videos y respondieron las preguntas nuevamente, pero esta vez con un dispositivo que grababa imágenes de sus cerebros.
El resultado del estudio
Los investigadores encontraron que los patrones de actividad cerebral eran muy similares cuando las ciudades eran iguales . Pero cuando se les preguntó sobre las tiendas que aparecían en más de una ciudad, las imágenes del cerebro ya eran muy diferentes, lo que indica que los cerebros de los participantes veían las ciudades repetidas diferentes de las dos tiendas que incluso eran completamente diferentes.
Los hallazgos sugieren que esta es la forma en que nuestro cerebro equilibra la retención de nueva información, sin un uso limitado de sus capacidades, con el reaprendizaje de procesos similares que ocurren todos los días. Luego, los hallazgos parecen sugerir que es la corteza prefrontal donde el cerebro contiene esta información.
Lo dicho hasta ahora podría resultar útil para estudiar la desorientación y el olvido espacial propios de los enfermos de Alzheimer.
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